Cecilio “Chilo” Guerra: “Mi pasión siempre ha sido la música”
A sus 82 años continúa enseñando a los niños que con sus inquietudes musicales se acercan hasta su casa en la calle El Rincón de San Sebastián de Margarita a hacerle alguna consulta.
Tal vez por un designio divino nació un 22 de noviembre -Día del Músico- y hoy tras 82 años de vida afirma con una gran convicción que “mi pasión siempre ha sido la música”. Con la amabilidad característica de la gente de pueblo, nos atendió Cecilio “Chilo” Guerra y su familia en su casa de la calle El Rincón, de San Sebastián de Margarita, en el municipio Gómez.
A pesar del paso del tiempo y de haber sufrido un accidente cerebro vascular (ACV), recuerda con mente prodigiosa sus inicios musicales. Es como si se abriera el baúl de los recuerdos para comenzar a contar. “Yo fui un autodidacta, eran los tiempos del general Juan Vicente Gómez, a casa que llegaba y veía un libro de música pedía que me lo prestaran. Este es un pueblo muy cultural. Desde pequeñito me gusta la música. Yo hablé con la mamá mía para que hablara con el maestro Augusto Fermín, quien era el director de la banda del Estado.
Ella fue y habló con Cayetano García quien le comunicó a Augusto Fermín de mis ganas de aprender música y cuando me dijeron que me esperaban, pa´llá me fui yo”. Continúa contando que por un buen tiempo caminó el trecho de El Portachuelo a La Asunción, “un camino tortuoso” recuerda, para ir a recibir sus clases. Sus primeras lecciones fueron de acordeón, “pero el maestro algunas veces se echaba los palos y yo perdía el viaje. Así que me mudé a Juangriego -cuyo trayecto también hacía a pie desde San Sebastián- a escuchar clases con el maestro Luis Manuel Gutiérrez. Pero le puedo decir, que el que más me influyó a mí fue el maestro Teosio Rojas”.
Con el paso del tiempo se fue comprando sus propios libros de música, y hoy comenta que lo más complicado de aprender fue el solfeo (lectura musical).
La apertura del baúl de los recuerdos lo lleva inevitablemente a hablar de su amplio recorrido musical. Una trayectoria que califica -por todos sus méritos- como para ser declarado Patrimonio Viviente del estado Nueva Esparta.“Estoy esperando ser declarado patrimonio, yo hice mis esfuerzos por este pueblo a través de la música”, dijo.
Durante 30 años formó parte de la Banda del Estado, en el año 1948 fundó la Escuela de Música de San Sebastián de Margarita, de donde han salido integrantes que han pasado a formar parte de distintas orquestas sinfónicas. También formó parte de varias bandas con las que recorrió los estados orientales. Fue fundador de la banda Santiago Mariño de Porlamar, profesor de teoría y solfeo en la escuela Inocente Carreño. Con el paso del tiempo, además de músico, también fue compositor y arreglista.
Pero lo que más encanta de “Chilo” Guerra, es que ni el paso de los años ni el ACV, le han impedido seguir impartiendo clases. Actualmente tiene algunos niños a quienes inicia en lo que considera la más maravillosa de todas las artes.
“Es importante que los niños se interesen y se entusiasmen por la música, que conozcan a los compositores, que sepan quiénes eran y cómo se vivió en los tiempos de antes”.
De ese modo de vida, asegura que lo que más se ha perdido es “el espíritu de colaboración”.
Parrandas
Como buen músico, Don Cecilio dice que fue bastante parrandero en sus años mozos, versión que confirma su esposa Juana de Guerra, con quien tiene ocho hijos. Después de 58 años de matrimonio, la señora Juana aconseja que la clave está en la paciencia. “Uno iba a casa a contar las cosas que le estaban pasando y le decían: hija, aguántese ahí. ¿Qué más iba a hacer uno?”, relató.
Para los músicos de San Sebastián de Margarita, los días de mayor movimiento son en los meses de diciembre y en enero cuando son las fiestas en honor al santo. El 20 del primer mes del año la parranda inicia desde temprano, a las 5:00 a.m. ya se comienzan a escuchar guarachas, pasodobles, vals y demás ritmos anunciando el inicio de la celebración. Al final de la tarde durante la procesión la música acompaña al santo “viejo” y al “mozo” a su reencuentro. Como músico se destacó en los instrumentos de viento, especialmente, en la trompeta, el trombón y el saxofón.
Para los músicos de San Sebastián de Margarita, los días de mayor movimiento son en los meses de diciembre y en enero cuando son las fiestas en honor al santo. El 20 del primer mes del año la parranda inicia desde temprano, a las 5:00 a.m. ya se comienzan a escuchar guarachas, pasodobles, vals y demás ritmos anunciando el inicio de la celebración. Al final de la tarde durante la procesión la música acompaña al santo “viejo” y al “mozo” a su reencuentro. Como músico se destacó en los instrumentos de viento, especialmente, en la trompeta, el trombón y el saxofón.
Entrevista realizada por la Periodista Desyi Ramos. El Sol de Margarita.
Pedro Manuel Quijada Gil.
Twitter: @quijadap
